Los atentados terroristas, el fenómeno migratorio, la pandemia de la COVID19 o la erupción del volcán de La Palma en nuestro país representan algunos casos ejemplarizantes de cooperación y coordinación entre actores centrales que poseen como finalidad la atención y la protección de la ciudadanía y sus bienes. Todos ellos constituyen claros referentes de cooperación entre los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado con los profesionales de la intervención directa en cualesquiera de sus ámbitos.
La finalidad de esta actividad académica es precisamente dar a conocer no sólo cómo se realiza esta colaboración y coordinación entre los diferentes actores, sino cuáles son, por medio de casos prácticos, las experiencias que ya se acumulan en el conocimiento para una actuación eficaz y eficiente ante situaciones de crisis.
Desde el inicio de la alerta sanitaria por COVID-19, las Fuerzas Armadas han tenido un papel activo en la lucha contra la propagación de la enfermedad, realizando un gran despliegue y llevando a cabo multitud de intervenciones en diferentes ámbitos de actuación en estrecha colaboración con el resto de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, organismos institucionales y administraciones públicas.
Durante este tiempo, el Mando de Operaciones (MOPS) del Estado Mayor de la Defensa (EMAD) ha dirigido dos importantes operaciones: Balmis y Baluarte, en la que participaron los distintos cuerpos y unidades. En esta conferencia, el Capitán de Corbeta Carlos Fernández López, EMAD / MOPS, Jefe turno Op. Misión Baluarte, comentará las principales acciones llevadas a cabo, así como el papel desarrollado por las Fuerzas Armadas durante la pandemia.
El episodio histórico La Empresa de Inglaterra (1588), supuso la tentativa geopolítica y estratégica más importante de la historia de España durante la Edad Moderna. Materializada en la expedición de la Gran Armada (Invencible), conllevó navegación tempestuosa, combates heroicos en el Canal de la Mancha, resultados cruentos (naufragios, prisioneros, fallecidos), y retornos maltrechos pero invictos, que han legado en las Islas Británicas y en la Europa continental occidental un variado y rico patrimonio cultural intangible (literatura, leyendas, mitos, música, teatro, folclore); tangible (arte - audiovisual y cinematográfico, escultórico, filatélico, grabado, monumental, medallístico, numismático, pictórico, textil-); y ambiental, con unos sitios naturales –algunos Patrimonio de la Humanidad reconocidos por UNESCO-, que constituyen testimonios de la interacción de pecios, vestigios y actuaciones humanas vinculadas a la experiencia de aquella unidad naval.
Tal conjunto, unido a las diversas y variadas actividades, tanto científicas (prospecciones arqueológicas subacuáticas) como académicas (debates, investigaciones, publicaciones), que sobre aquella expedición naval se han desarrollado; y sumado a la dinamización tanto institucional (conmemoraciones, diseños de rutas turístico-culturales, exhibiciones y restauraciones en museos), como popular (rememoraciones, recreaciones) que ha recibido, configura un entorno singular (atmósfera Spanish Armada), muy desconocido en España pero que merece y precisa divulgarse didáctica y rigurosamente, como así mismo la vinculación entre Cartagena y el desarrollo del suceso histórico.